Como diseñadores al trabajar junto a células ágiles en algún momento nos hemos sentido fuera de lugar, nos hemos preguntado cómo sincronizar nuestro trabajo de la forma más eficiente con los equipos de desarrollo, hemos sentido que nuestros tiempos de ejecución y foco de trabajo son diferentes, que no tenemos el espacio suficiente para desarrollar y testear propuestas o que sencillamente tomamos pedidos puntuales sin una participación estratégica y sin empatizar con los usuarios y clientes.
Para muchos el cambio de perspectiva y la integración en entornos ágiles representa un gran reto, pero justamente partiendo de aceptar y entender las diferencias que tenemos como diseñadores, vamos a poder crear estrategias más efectivas de integración. En general tenemos perfiles creativos, detallistas, resolutivos y siempre queremos mejorar o iterar nuestras propuestas. Hemos encontrado en procesos de trabajo como Design Thinking el refugio perfecto para explorar problemáticas y generar soluciones enfocadas en la perspectiva de las personas, pero nuestro trabajo no termina en ese punto, también nos involucrarnos en los procesos de desarrollo y futuras iteraciones de los productos y servicios que diseñamos para garantizar la mejor implementación posible en el mercado.
Bajo esta dinámica nos relacionamos con otros marcos de trabajo utilizados por los equipos de producto y desarrollo, como Lean y Scrum; en este punto puede resultar familiar escuchar conceptos como MVP, Backlog y Sprint, o ceremonias como Planning, Daily y Review. Sin darnos cuenta estamos inmersos en diferentes procesos, metodologías o marcos de trabajo al mismo tiempo y comienzan a surgir dudas sobre los límites de cada uno, cómo se relacionan y complementan.
Design Thinking
Se genera desde la empatía, teniendo como punto de partida la formulación de un problema como pregunta abierta, en donde se asume que hay una solución pero no se sugiere de entrada. En sus diferentes etapas: empatizar, definir, idear, prototipar y probar, pasamos por procesos de divergencia y convergencia hasta obtener como resultado una propuesta o prototipo de solución basada en las necesidades de las personas dentro del contexto analizado.
Lean Startup
Tiene como eje central la eficiencia, en este caso el punto de partida es una hipótesis de solución a un problema. Es un proceso experimental en donde se aprende a partir de la construcción y medición para obtener un producto mínimo viable.
Scrum
Es un marco de trabajo en donde se priorizan las funcionalidades de un producto, para generar una mejora continua de forma iterativa en ciclos o sprints. A través de este marco se puede dividir un gran problema en pequeñas partes que van sumando valor al producto o servicio de forma constante.
A pesar de las notables diferencias, estos procesos se complementan muy bien. Podemos abordar el diseño de nuevos productos y servicios desde una etapa de investigación para empatizar con las necesidades de los usuarios, hasta definir propuestas de diseño o hipótesis de soluciones. Estas propuestas van a ser el motor inicial para obtener un mínimo producto viable a través de la construcción y la medición; posteriormente podemos iterar este producto cuantas veces sea necesario para incrementar el valor. Este juego entre los 3 procesos no es necesariamente lineal, en muchos casos no abordamos proyectos desde su nacimiento, en la búsqueda de mejorar de forma iterativa los productos en muchos casos vamos a tener la necesidad de conocer de mejor forma a nuestros usuarios, generando un nuevo proceso de empatización con el que se definirán nuevas hipótesis sobre ese producto.
Como diseñadores el poder movernos de forma fluida entre procesos, dependiendo de la naturaleza de los proyectos, puede ser la clave para mejorar las respuestas que brindamos y optimizar nuestras operaciones, desde una mirada estratégica y cross-funcional, para poder interactuar de forma holística con todas las áreas involucradas en una organización.
Beneficios del trabajo de diseño en entornos ágiles.
- Se desarrolla la colaboración y comunicación con otros equipos.
- Se puede medir la capacidad de trabajo de las personas y del equipo a través de los sprints.
- Se optimizan los procesos de trabajo.
- Se promueve la búsqueda constante de feedback.
- Se genera una percepción de responsabilidad y mentalidad ágil.
- Aumenta la satisfacción de los equipos y la motivación al ir generando valor sobre los productos y servicios de forma constante.
- Se fomenta el liderazgo adaptativo.
- Aumenta la satisfacción del cliente y stakeholders al poder ver resultados constantemente.
Consideraciones a tener en cuenta en equipos de diseño ágiles.
- Generar un Backlog propio y trabajar sobre los ítems mejor estructurados y definidos.
- Promover la comunicación con los POs, Desarrolladores y Stakeholders.
- Alinear la planificación con el equipo y POs para que todos cuenten con los recursos e información necesaria en cada sprint.
- Tener en mente que los entregables de Diseño pueden ser el punto de partida sobre ítems del backlog de los equipos de desarrollo. En estos casos considerar el tiempo necesario previo a desarrollo.
- Considerar que cualquier actividad o tarea de diseño la podemos dividir en partes. El diseño de la propuesta final no es el único entregable.
- Promover el uso de métricas para poder medir el impacto del trabajo del equipo.
